Un paquetito de post-it rojos y... en cinco minutos te sale un corazón!
Va a ser cierto el dicho de que las crisis agudizan el ingenio. No teníamos un duro en la oficina de Nueva York para decoración. Mujer, un espumillón en un chino no puede ser más barato... ya, pero no se trataba de eso. Se supone que Global y Paint The Town Red eran lo más en cuanto a la organización de eventos. Asi que me encerré en la despensa/almacén y allí, rodeada de grapadoras y cajas de sobres descubrí las ramas de mi abeto, los restos de una fiesta del pasado, una docena de coronas de terciopelo de la lady
Mi hijo Diego me había pedido tan sólo una cosa para Nueva York. Mamá, cuando vayamos contigo, por favor, me encantaría que tuvieras un árbol de navidad en tu apartamento. Nueva York es la ciudad de la Navidad, en mi calle había uno de los mercadillos de abetos más monos que había visto en mi vida, en el hall de The Strand 500 west mi casa, habían plantado los conserjes un pinaco de casi 5 metros..¿acaso NY no tenía ya bastante decoración como para tener que dejarme 200 dólares en un pino?Gastarme un potosí por unas ramas que luego pasaría el alcalde en persona a recoger? ¿Estaba dispuesta a privarme de esa escena con Bloomberg? Peor aún,¿estaba dispuesta a decepcionar a Diego?
Compré bastoncitos de caramelos, mis cerditos hucha púrpura de Old Navy (veaseles en la entrada de este blog titulada "Los que más saben de York"), lucecitas de colores, los soldaditos más emblemáticos de estas fechas en la city, y... mucha paciencia. La de veces que pude levantar del suelo la torre de coronas, cuando no se desmontaba una se desmontaban todas...
Pero funcionó. Abrieron la puerta del ascensor y se encontraron con el primer abeto de potsit en la puerta, como el que pusimos en Global.
Les hice entrar en casa con los ojos cerrados, todas las luces apagadas menos las del árbol y, por supuesto,las de Manhattan, rodeado mi abeto de ventanales abiertos al abismo de la luz... la ciudad de Nueva York.
Mi hermano, la primera vez que fue a Madrid de pequeño,en agosto, viendo esa calle Serrano iluminada en la noche por el tráfico exclamó: "la navidad!!!"
Pues eso pasa con la noche de la city, que sus luces son a tu espíritu lo que quieras: mucha Navidad, mucho Sinatra, mucho glamour...
La visión de mis chicos fué espectacular. Diego dice que ese momento sigue siendo uno de los más mágicos que recuerda del viaje.
Como despedida, mis hijos me dejaron su pequeña aportación decorativa en la oficina. Como veis, no tuvieron que soltar ningún dólar en el recuerdo. La figura que me regalaron en la puerta del despacho la pintaría yo más adelante, a tamaño natural, en una de las paredes de mi nuevo apartamento. Impresionante.
Podría recomendar dentro de mis básicos para la decoración navideña neoyorquina lugares como ABC http://www.abchome.com/, o Jack's 99 Cent Store,http://jacks99world.com/default.asp, las antípodas, el primero es mega guassss y el segundo chungui Jacksss, eso, a dólar la pieza.
Pero sin dudarlo, prefiero tirar de la tela de forro roja con la que cada año empaqueto los árboles de casa.
Telemadrid este año se sumó a la creación de un christma humilde y creativo. Lourdes Corredor, la directora del departamento de autopromociones y Eduardo Cabrera, realizador y coordinador, se encargaron de esta pieza donde, además, la música es una joyita
http://navidad.telemadrid.es/
FELIZ NAVIDAD
Va a ser cierto el dicho de que las crisis agudizan el ingenio. No teníamos un duro en la oficina de Nueva York para decoración. Mujer, un espumillón en un chino no puede ser más barato... ya, pero no se trataba de eso. Se supone que Global y Paint The Town Red eran lo más en cuanto a la organización de eventos. Asi que me encerré en la despensa/almacén y allí, rodeada de grapadoras y cajas de sobres descubrí las ramas de mi abeto, los restos de una fiesta del pasado, una docena de coronas de terciopelo de la lady
Mi hijo Diego me había pedido tan sólo una cosa para Nueva York. Mamá, cuando vayamos contigo, por favor, me encantaría que tuvieras un árbol de navidad en tu apartamento. Nueva York es la ciudad de la Navidad, en mi calle había uno de los mercadillos de abetos más monos que había visto en mi vida, en el hall de The Strand 500 west mi casa, habían plantado los conserjes un pinaco de casi 5 metros..¿acaso NY no tenía ya bastante decoración como para tener que dejarme 200 dólares en un pino?Gastarme un potosí por unas ramas que luego pasaría el alcalde en persona a recoger? ¿Estaba dispuesta a privarme de esa escena con Bloomberg? Peor aún,¿estaba dispuesta a decepcionar a Diego?
Compré bastoncitos de caramelos, mis cerditos hucha púrpura de Old Navy (veaseles en la entrada de este blog titulada "Los que más saben de York"), lucecitas de colores, los soldaditos más emblemáticos de estas fechas en la city, y... mucha paciencia. La de veces que pude levantar del suelo la torre de coronas, cuando no se desmontaba una se desmontaban todas...
Pero funcionó. Abrieron la puerta del ascensor y se encontraron con el primer abeto de potsit en la puerta, como el que pusimos en Global.
Les hice entrar en casa con los ojos cerrados, todas las luces apagadas menos las del árbol y, por supuesto,las de Manhattan, rodeado mi abeto de ventanales abiertos al abismo de la luz... la ciudad de Nueva York.
Mi hermano, la primera vez que fue a Madrid de pequeño,en agosto, viendo esa calle Serrano iluminada en la noche por el tráfico exclamó: "la navidad!!!"
Pues eso pasa con la noche de la city, que sus luces son a tu espíritu lo que quieras: mucha Navidad, mucho Sinatra, mucho glamour...
La visión de mis chicos fué espectacular. Diego dice que ese momento sigue siendo uno de los más mágicos que recuerda del viaje.
Como despedida, mis hijos me dejaron su pequeña aportación decorativa en la oficina. Como veis, no tuvieron que soltar ningún dólar en el recuerdo. La figura que me regalaron en la puerta del despacho la pintaría yo más adelante, a tamaño natural, en una de las paredes de mi nuevo apartamento. Impresionante.
Podría recomendar dentro de mis básicos para la decoración navideña neoyorquina lugares como ABC http://www.abchome.com/, o Jack's 99 Cent Store,http://jacks99world.com/default.asp, las antípodas, el primero es mega guassss y el segundo chungui Jacksss, eso, a dólar la pieza.
Pero sin dudarlo, prefiero tirar de la tela de forro roja con la que cada año empaqueto los árboles de casa.
Telemadrid este año se sumó a la creación de un christma humilde y creativo. Lourdes Corredor, la directora del departamento de autopromociones y Eduardo Cabrera, realizador y coordinador, se encargaron de esta pieza donde, además, la música es una joyita
http://navidad.telemadrid.es/
FELIZ NAVIDAD
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